Deliciosas y crujientes galletas saladas del tamaño de un bocado elaboradas en España con sal marina y aceite de oliva virgen extra, siguiendo recetas transmitidas de generación en generación. Esta variedad en particular, infusionada con pimentón dulce, encarna el auténtico sabor de España. Eleva tus momentos culinarios con estos tesoros artesanales de Pan de Olivo.
El Pan de Olivo, con su delicioso crujido y rico sabor, es perfecto por sí solo, lo que lo convierte en un refrigerio ideal para cualquier ocasión. Estas galletas también complementan maravillosamente las tablas de embutidos, proporcionando un maravilloso contraste con diversos quesos, carnes y frutas. Además, combinan excepcionalmente bien con hummus, pastas para untar, patés o cualquiera de sus salsas favoritas, mejorando la experiencia gastronómica general con su calidad artesanal y su perfil de sabor único.
Originariamente, la regañá era conocida como galleta de mar o cracker, que se elaboraba a partir de una masa con forma de pan plano y se horneaba sin humedad. Cabe destacar que sometiéndolo a sopas de cereales a alta temperatura se podría obtener un alimento duradero y con poca humedad. Éste luego se repartía entre los tripulantes que, bajo un estricto régimen disciplinario, veían restringidas sus libertades y eran confinados a regañadientes (de ahí el nombre de este aperitivo). De un simple pan, ahora se ha transformado en un manjar que cualquier persona puede disfrutar como parte de su dieta.
INGREDIENTES:
Harina de trigo, agua, aceite de oliva virgen extra (12%), sésamo (4%), pimentón ahumado, levadura y sal.
Contiene gluten y sésamo. Puede contener trazas de soja y mostaza.
TAMAÑO:
7 onzas (200 gr.)